Carlos Becco, ingeniero agrónomo, Alumni PAD 2004 y PDD 1994 en IAE, y autor del libro "La revolución digital del agro", destacó las oportunidades y desafíos que se presentan para el sector agrícola frente a la irrupción de las nuevas tecnologías.
La incorporación de herramientas digitales ya forma parte de la cotidianeidad de diversos sectores de la economía, pero una de las áreas que comenzó a aplicarla en el último tiempo fue el agro. Así lo explica Carlos Becco, ingeniero agrónomo, Alumni PAD 2004 y PDD 1994 en IAE, y autor del libro "La revolución digital del agro".
“Soy ingeniero agrónomo. Yo tengo 40 años de profesión y 40 años que estoy metido en esta actividad tan apasionante que es agro. Me recibí en la UBA a los 23 y me fui a trabajar al norte, a San Martín del Tabacal”, recordó Becco. Y desde allí, comenzó una larga carrera en grandes compañías líderes del sector agropecuario, como Monsanto y Syngenta, pero luego se encargó de comandar Índigo en Argentina, una startup estadounidense dedicada a la aplicación de la tecnología en el campo.
“Ambas compañías donde trabajé desaparecieron. Eso es un indicador de que el agro tuvo una etapa de tremendo crecimiento e innovación y tecnología a tasas muy altas que comienza a consolidarse”, explicó.
Según relató, “el agro siempre fue un sector tradicional, muy estable, con mucha tecnología, pero fundamentalmente basada en grandes jugadores, donde todo lo que era la revolución de los fondos, el desarrollo de inversiones como startups, no había llegado”, por lo que empezó a buscar oportunidades para esa área vinculadas a la innovación.
El impacto del cambio climático en el agro
Entre las distintas situaciones que despertaron la preocupación global, una de las más importantes de los últimos años es el cambio climático. Sobre este punto, Becco destacó que el agro es responsable aproximadamente del 15% del efecto invernadero, especialmente por el uso de fertilizantes y maquinarias.
En este sentido, consideró que puede haber dos soluciones para esta problemática: incrementar la cantidad de bosques o hacer una agricultura diferente.
“Hay que cambiar el paradigma. En vez de reproducir granos hay que producir biomasa y cuidar el suelo. Eso genera el interés de los negocios de bonos de carbono. Hay una gran oportunidad en el mundo para, en vez de hacer agricultura de cultivos, hacer agricultura de carbono”, sostuvo.
La revolución digital del agro
Luego de sus distintos desafíos laborales, Becco decidió dar un salto hacia el mundo de la digitalización. “Hay muchos que están mirando el agro con ojos innovadores y dije: ‘voy a colaborar con ellos’. Yo había visto la revolución digital, que está empezando a suceder y pensé en contar y compartir lo que está pasando”, reconoció.
De esta manera publicó su libro, llamado “La revolución digital del agro”, en el que distinguió la importancia del sector como la industria más grande del mundo por la cantidad de gente que emplea y la capacidad productiva que tiene, aunque remarcó su bajo nivel de digitalización.
“Prácticamente en todos los sectores de la economía los líderes analógicos han sido desplazados por los líderes digitales. En el agro sorprendentemente los líderes analógicos aún reinan. No hay un líder digital. Índigo fue el primer intento, pero todavía el agro vive en modo analógico”, reflexionó.
Sin embargo, según contó, esa situación empezó a cambiar. “En los últimos años se está generando una revolución de startups y tecnologías que están creciendo, floreciendo, y que generan una energía y una serie de oportunidades fenomenales en el agro”, indicó. Y detalló: “Eso sucede porque era un mercado virgen porque los inversores no se sentían atraídos y ahora lo empiezan a entender. Hay un cambio generacional en el agro y eso también trae oportunidades y desafíos”.
Nuevas oportunidades
En este sentido, destacó una serie de oportunidades que se abren para el agro. “La primera es que el agro tiene la oportunidad de pasar de ser de villano a héroe, fundamentalmente en lo ambiental. Puede ser el responsable de la descarbonización de la economía”, puntualizó.
En segundo lugar, señaló: “Hay una oportunidad enorme sobre la trazabilidad de los alimentos. Creo que cada alimento va a tener su código QR que se pueda escanear para saber a dónde se produjo y de dónde viene. Hay una sociedad más demandante sobre el agro por eso y se puede hacer gracias a la revolución digital”. Y añadió: “La tercera oportunidad es que en el mundo hubo 30 billones de dólares de inversores que fueron a proyectos agrícolas. Esa plata fue destinada a emprendimientos que están revolucionando el agro”.
En este contexto, Becco describió que, según Endeavor, hay más de 100 empresas que nacieron en los últimos cinco años dedicadas al agro, con lo que el potencial de esas firmas se incrementa y, según su visión, el agro podría tener su primera empresa unicornio.
“Es un sector ulltracompetitivo, exportador, generador de divisas, que está frente a la oportunidad de vivir una revolución más eficiente, basada en datos que pueda ayudar a mejorar su eficiencia para apuntar a ser un jugador clave en el cambio climático, en darle respuesta a los consumidores y generar oportunidades laborales”, resumió Carlos Becco.