Cuatro referentes de distintos espacios políticos se reunieron en el auditorio del IAE Business School para dialogar sobre las reformas estructurales que debe hacer la Argentina en materia de pobreza, educación, justicia, corrupción, impuestos y sistema electoral, entre otros, y de cómo formar consensos para llevarlas adelante.
Moderados por los profesores del IAE Roberto Luchi y Alejandro Zamprile, Eduardo Amadeo, diputado nacional por Cambiemos; Margarita Stolbizer, presidente del partido GEN; Juan Manuel Urtubey, gobernador de Salta, y Marco Lavagna, diputado nacional del Frente Renovador, participaron del Ciclo anual Consensus: “El Consenso Político. El desafío pendiente de construir acuerdos de largo plazo”.
El primero en tomar la palabra fue Eduardo Amadeo, legislador por la provincia de Buenos Aires, que señaló que “estamos viviendo una situación crítica, por errores propios, pero también por carencias estructurales que tiene la Argentina, como la productividad, la economía y la pobreza”.
“Tenemos una economía bimonetaria, el peso no existe más como reserva de valor. Conseguir financiamiento acudiendo al mismo mecanismo de ahorro de la sociedad es difícil”, dijo Amadeo, y agregó: “Un estado ineficiente no sirve para resolver ni los problemas económicos ni sociales de la sociedad”.
Además, resaltó que “no es imposible encontrar consensos porque nosotros logramos aprobar más 200 leyes siendo minoría”, y señaló también los acuerdos económicos: “En Vaca Muerta hubo un acuerdo entre los sindicatos para acordar metas de productividad. Es posible reducir el conflicto a través del diálogo”.
Luego fue el turno de Margarita Stolbizer, que dijo que “los consensos se construyen entre quienes piensan diferentes; eso es empezar a reconocer la diversidad que tiene el sistema democrático”.
“El diálogo y el consenso fortalece a los gobiernos, no los debilita. El consenso se construye en base a un trípode: democracia, diálogo y decencia. Hay que reconocer cuáles deben ser esos temas de consensos y buscar una agenda estratégica vinculada con una visión compartida”, agregó.
Asimismo comentó que “dentro del presupuesto está estimado pagar 600.000 millones de pesos para pagar los intereses de la deuda, que es mayor a los presupuestado para educación, salud, ciencia y tecnología”.
Y añadió: “El problema del presupuesto no es la inclusión de los intereses de la deuda. El problema fue tomar deuda sin el consenso necesario. Tenemos un endeudamiento que compromete al país por mucho tiempo, pero de nuevo, el problema no es la deuda sino a dónde va a parar y en qué condiciones la tomamos. Hay 276.000 millones de dólares que tienen los argentinos fuera de nuestro sistema económico. ¿Qué vamos a hacer con eso?”.
Seguido, Marco Lavagna, legislador por la ciudad de Buenos Aires, dijo que “los consensos no se los debe buscar solamente en la clase política, tiene que institucionalizado e incluir a distintos sectores de la sociedad, como a los empresarios”.
“Consenso no significa decir todo que sí. Tiene que haber una prioridad y tenemos que estar dispuestos a escuchar la opinión del otro”, indicó, y comentó: “Generar puestos de trabajo implica inclusión social. Un plan social es contención social, pero no inclusión. La discusión que estamos dando es cómo generamos puestos de trabajo. Tenemos que decirnos la verdad”.
Con respecto al presupuesto que presentó el Gobierno, Lavagna hijo indicó: “No es equilibrado, tiene un déficit de tres puntos del producto porque hay que pagar los intereses de la deuda. Son impuestos que tenemos que cobrarle a toda la sociedad para pagarla”, agregó.
Finalmente habló Juan Manuel Urtubey y dijo que “la tarea de buscar consensos en un país como la Argentina es particularmente compleja”. “Tenemos que asumir nuestra realidad, el país se originó con la lógica de la confrontación permanente: amigo y enemigo. El gran desafío es cambiar este paradigma. La confrontación no empezó hace tres años ni hace 10 años. Hay dos corrientes enfrentadas en nuestra génesis”, dijo.
Luego coincidió con Lavagna en que “decir todo que sí es fácil, pero decir todo que no, es más fácil todavía. Lo difícil es discernir”. Luego, ante la propuesta del funcionario del Frente Renovador de reformar el sistema electoral para votar solo cada cuatro años, Urtubey indicó que “hay que bajar el dramatismo de que el mundo empieza o termina en una elección y entender procesos evolutivos donde vamos escuchando a la gente. Creo que hay que ir a mecanismos de participación directa con referéndum y consultas populares con mucha más frecuencia. Hoy hay mecanismos tecnológicos que nos permiten hacerlo sin gastar una fortuna”.
Por último, concluyó: “Debemos abrir canales de participación ciudadana permanentes: Una democracia más participativa en detrimento de la democracia representativa. Estamos en condiciones de hacerlo y de valorar el clima diferente que hay en la Argentina. Debemos salir de esta incompatibilidad que tenemos con el disenso y encontrar mecanismos de administración que permitan ir a una democracia vibrante. La Argentina necesita un plan de desarrollo estratégico, saber a dónde queremos ir”.