A lo largo de mi carrera hice muchos cambios de acuerdo a lo que iba descubriendo. Los desafíos se presentan muchas veces sin ser buscados, y me animé a afrontarlos, a ilusionarme con grandes sueños, a rodearme de personas a quienes admiro y de quienes podía aprender mucho.
También, a lo largo de mi carrera, fuí parte o armé equipos de trabajo con quienes nos complementamos, aprendimos y la pasamos bien, mientras trabajábamos. Es algo que sigo haciendo hoy en día y me parece sumamente valioso y enriquecedor.
Reconozco que he tenido la suerte de trabajar en industrias en las que ser mujer no limitaba el potencial de crecimiento. Sé que no es así en todas las industrias/ sectores ni en todas las empresas. Como mujer en un rol directivo, creo que tengo una oportunidad para ayudar a revalorizar el aporte de la mujer a la empresa y la sociedad.
Necesitamos que ser directiva mujer sea lo normal en toda industria. Para eso, los role models juegan un papel importante. Muchas veces, necesitamos creer más en nuestro potencial.
Teniendo en cuenta las características de los líderes del nuevo milenio que escuchan, participan a los otros, comunican, comparten poder e información, buscan consenso y luego deciden, y entendiendo que la mujer cuenta con estas habilidades de manera innata, tenemos que saber que no hace falta imitar el modelo de liderazgo del varón sino aprovechar al máximo nuestras características propias.
07/07/2023 Revista Prensa Económica - Nota - Información General - Pag. 47